Entonces no hay nada más que endulce la vida del hogar. La verdadera Adoración familiar es una fuente que trae corrientes de influencias santas en cada parte de la casa. Se trata de una vasija de perfume que derrama perfume sobre todos. Suaviza las asperezas. Reprime la ira. Tranquiliza la impaciencia. Arregla diferencias. Somete las malas pasiones. Corazones que se atraen juntos a los pies de Dios todos los días-no pueden llegar a estar muy lejos. Las fricciones del día se olvidan, cuando todas las voces se mezclan en el mismo canto celestial. Cuando las palabras tiernas de inspiración caen con sus consejos de gracia consejos – todo sentimiento de crueldad se desvanece.
El altar en medio de nuestra vida familiar, maravillosamente santifica y endulza las relaciones. Además, pone una nueva fuerza en cada corazón. Consuela la tristeza. Es un escudo contra la tentación. Suaviza las arrugas de la preocupación. Inspira fuerza para llevar la carga. Acelera todo sentimiento piadoso, y mantiene el fuego ardiendo en el altar de cada corazón.
- del libro Día de la Semana de la Religión por JR Miller, publicado por la Gracia Gemas