Dios ha diseñado la alabanza para sanar a los quebrantados de corazón, abrazar a los marginados y vendar nuestras heridas. Cuando su pueblo se reúne para alabar, Dios los saca de su mundo de dolores y fracasos y los lleva a su terreno de acción de gracias. Él es tan bondadoso al llamarnos fuera de nuestro mundo de desaliento. El reemplaza nuestras decepciones con elogios. En el Salmo 147, nos enteramos de que la “alabanza es hermosa." Alabar es experimentar las misericordias de Dios y regocijarse en la bondad de Dios - el corazón del Evangelio.
Alabad a Jah, porque es bueno cantar salmos a nuestro Dios,
porque suave y hermosa es la alabanza. Jehová edifica a Jerusalén;
a los desterrados de Israel recogerá.
Él sana a los quebrantados de corazón
y venda sus heridas. Él cuenta el número de las estrellas;
a todas ellas llama por sus nombres. Grande es el Señor nuestro,
y mucho su poder, y su entendimiento es infinito. Jehová exalta a los humildes
y humilla a los impíos hasta la tierra.
Cantad a Jehová con alabanza, cantad con arpa a nuestro Dios.
Él es quien cubre de nubes los cielos, el que prepara la lluvia para la tierra,
el que hace a los montes producir hierba. Él da a la bestia su mantenimiento
y a los hijos de los cuervos que claman.
No se deleita en la fuerza del caballo ni se complace en la agilidad del hombre.
Se complace Jehová en los que lo temen
y en los que esperan en su misericordia. ¡Alaba a Jehová, Jerusalén;
Sión, alaba a tu Dios!, porque fortificó los cerrojos de tus puertas;
bendijo a tus hijos dentro de ti. Él da en tus territorios la paz;
te hará saciar con lo mejor del trigo. Él envía su palabra a la tierra;
velozmente corre su palabra. Da la nieve como lana
y derrama la escarcha como ceniza. Echa su hielo como pedazos;
ante su frío, ¿quién resistirá? Enviará su palabra y los derretirá;
soplará su viento y fluirán las aguas. Ha manifestado sus palabras a Jacob,
sus estatutos y sus juicios a Israel. No ha hecho así con ninguna otra de las naciones;
y en cuanto a sus juicios, no los conocieron.¡Aleluya!