Aquí están algunas cosas a tener en cuenta en relación con las reuniones de oración corporativas. Hay mucho que decir sobre el enfoque hacia Dios de nuestra oración, que es el asunto más importante. Este asunto más importante en toda oración es el reconocimiento sincero de la majestad de Dios, expresando nuestro amor y gratitud hacia Él. Además, traemos nuestras peticiones ante Él. Sin embargo, hay algunos consejos que nos pueden ayudar al orar en un entorno corporativo:
1. Oren Todos - para cumplir el mandato de orar.
A menudo, algunos terminan orando y es la misma gente de siempre.
2. Oren corto – para que mas oren.
Oraciones largas deben ser evitadas a fin de permitir que todos oren.
3. Oren Frecuentemente - para redimir el tiempo.
A menudo hay espacios en las oraciones con largo tiempo de silencio. La iglesia debe evitarlo, y tomar el tiempo para dar más gloria a Dios.
4. Oren juntos - para ser unificados
Cuando oremos debemos estar orando lo mismo juntos con sincera afirmación de la oración.
5. Oren y digan “Amén” - para compartir la alegría
Dejar una oración caer al suelo sin acuerdo explícito y decir “amén”, ya sea en su corazón o con la boca disminuye el peso de la oración en su corazón.
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Afirmamos que Dios Todopoderoso es el Creador soberano y Conservador de su pueblo y de todas las instituciones que traen bendición para la humanidad, incluyendo la iglesia y la familia, es por lo tanto merecedor de nuestro honor y humilde obediencia a Su Palabra (Génesis 1:28; . Salmos 46: 1; 77: 13-15; 95: 6-7; 100: 3; 119: 73; Proverbios 18:10; Mateo 16:18; 19:.. 6; Juan 14:15; Colosenses 1 : 16-17; Santiago 1:17; 1 Pedro 4:19).
Negamos / rechazamos que nosotros siendo meras criaturas, tenemos derecho a remodelar la iglesia y la familia de acuerdo a nuestras vanas imaginaciones alterando el gobierno, adoración, discipulado, los roles de género, la asignación de responsabilidades, o cualesquiera otros patrones normativos prescritos por Dios y revelados en la Escritura.
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Aquí hay algunos consejos de Erik Raymond para los padres y pastores sobre cómo ayudar a sus hijos a escuchar y aplicar un sermón:’
Ayudando a los niños a Beneficiarse del Sermón
Como pastor a menudo me hacen la pregunta: “¿Tienes algún consejo para ayudar a mis hijos a beneficiarse del sermón?”
Esta es una pregunta que realmente aprecio porque reconoce la importancia de la predicación de la Palabra de Dios y la recepción de la misma.
Reconoce que hasta los niños deben escuchar, y en la mejor de su capacidad, entender lo que está siendo predicado.
Lo siguiente son algunas de las cosas que he hecho como un papá y también como un pastor.
Padres antes del Sermón
Lean el pasaje como familia antes de la mañana del domingo. Esto es fácil y muy importante. Ellos oyen el pasaje leído por papá o mamá y ven tu compromiso con la Palabra de Dios. Esto va más allá de lo que puedas imaginar.
Hagan y respondan preguntas sobre el pasaje. Mientras lo lees, haz preguntas que les ayuden a ver las conexiones y otras características importantes.
Destaca temas claves.
Tomen notas particulares sobre el contexto. Un buen estudio de la Biblia es útil aquí (mi favorito).
Oren por el pastor y los que se reunirán en la mañana. Después de la lectura tomen algún tiempo para orar por el pastor y el servicio. Rueguen a Dios que muestre la belleza de Cristo y fortalezca la confianza de la gente en la Biblia.
Pide a los niños (especialmente a los pequeños) que oigan por un punto clave. Si pueden oír una cosa y realmente entenderla entonces estás ganando.
Oren antes de salir del carro. Después de conducir a la iglesia, tomen un breve momento para orar en familia. Oren para que oigan, presten atención y amen la Palabra de Dios.
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Nosotros afirmamos que la única esperanza para la iglesia, la familia, y el mundo caído es el evangelio del Señor Jesucristo (Mal. 4: 6; Lucas 01:17; Juan 14:6 ; Hechos 2:39; 04:12; 16:30-34; Efesios 2:12-13 ).
Nosotros negamos/rechazamos que haya alguna esperanza para la iglesia, la familia y el mundo caído aparte de Jesucristo y su Evangelio o que los miembros de la familia son capaces de realizar sus funciones, ser debidamente reformados, o experimentar verdadera bendición, excepto por el poder del evangelio de salvación y santificación de sus miembros.
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Nosotros afirmamos que nuestro Señor Jesucristo es la Cabeza de su Iglesia, después de haberla comprado con su propia sangre, y que Él gobierna su Iglesia por medio de Su Santo Espíritu a través de su Palabra, a fin de dar a conocer la multiforme sabiduría de Dios y dar gloria a Él Mismo ( Deut . 8:3 ; Mat. 28:18-20; Juan 17:17; Hechos 20:28; Efesios 1 : 19-23 ; 03:10 ; 04:15 ; 05:23 ; Colosenses 1:18 ).
Nosotros negamos/rechazamos todas las invenciones y reglas hechas por el hombre que ignoran la Palabra de Dios, exaltan al hombre, y usurpan la autoridad del Señor Jesucristo sobre Su iglesia.
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Afirmamos que nuestro Dios omnisciente se ha revelado El mismo y Su voluntad en una revelación completa - los sesenta y seis libros del Antiguo y Nuevo Testamento, lo cual es totalmente adecuado, tanto en el contenido y la claridad de todo lo que pertenece a la vida ( la salvación) y la piedad (santificación), incluyendo el orden de la iglesia y la familia (Deuteronomio 30:11-14; 1 Cor. 11:1-12; 14:34 ; Gálatas 1 : 8-9; Efesios 5:22-6:4 ; 1 Tim 3:15; 2 Timoteo 3:16-17; Heb. 1:1-2; 2 Pedro 1:3,4 ) .
Nosotros negamos/rechazamos que la Palabra de Dios es adecuada para la iglesia y la vida familiar y decimos que tenemos que adoptar las tradiciones de los hombres de la filosofía, la psicología , el pragmatismo, el entretenimiento, los modelos de negocios corporativos, o técnicas modernas de comercialización.
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Estos son los siete objetivos de CNIFI:
1. Preservar y difundir el evangelio verdadero de una generación a la siguiente, a través de iglesias y familias bíblicamente ordenadas, que prediquen el evangelio, y que exalten a Cristo.
2. Confiar solamente en las Escrituras en “todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad” (2 Pedro 1: 3), obedeciendo la Biblia como totalmente suficiente para el ordenamiento de la Iglesia y de la familia y resistiendo el engaño de Satanás que esta diseñado para reemplazar las metas y los métodos de Dios por los métodos del mundo.
3. Enfocar a las iglesias y a las familias en la Palabra de Dios, al restaurar la práctica de enseñar todo el consejo de Dios a través de la predicación exegética de la Escritura en la Iglesia por medio de ancianos bíblicamente calificados y por la instrucción diaria de padres y madres en los hogares.
4. Establecer la importancia central de la iglesia local para el equipamiento de las personas y las familias.
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Recientemente prediqué un sermón titulado, ” ¿A que haréis semejante a Dios?,” en Isaías 40:18-20, donde Isaías contrasta la majestad infinita de Dios con la total insuficiencia de los ídolos. En este pasaje, Isaías se burla del hacedor de los ídolos, del idólatra, y del propio ídolo. En el recorrido de este sermón expositivo, identifiqué siete marcas de la idolatría en la Biblia:
1. La idolatría llega a través de las imágenes engañosas de Dios, Éxodo 20: 4
2. La rebelión y terquedad son expresiones de la idolatría, 1 Samuel 15
3. Las obras de la carne son idolatría, Gal 5:19
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Aquí está un artículo maravilloso por Jani Ortlund sobre que es la prioridad más importante de los padres. Ella dice,
“Vamos a ser las mujeres que valoran y transmiten la Palabra de Dios!
¿Cómo ayudamos a que los niños reverencien y tengan un banquete con el más influyente libro de todos los tiempos? Ningún libro ha vendido más copias, en más idiomas-de la historia. Ningún libro ha afectado al mundo más profundamente. ¿Cómo podemos levantar a niños, adolescentes y adultos jóvenes empapados y saturados de la Biblia?
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Pero si todos profetizan, y entra algún incrédulo o indocto, por todos es convencido, por todos es juzgado; lo oculto de su corazón se hace manifiesto; y así, postrándose sobre el rostro, adorará a Dios, declarando que verdaderamente Dios está entre vosotros. ¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación.
1 Corintios 14: 24-26
Si bien somos conscientes las reuniones de la iglesia tienen su propósito principal para edificar la iglesia, también debemos reconocer que siempre hay incrédulos en nuestras reuniones de la iglesia. Hay niños que nunca han sido convertidos, así como adultos que están alineados con el pueblo de Dios, pero realmente no han sido convertidos. Cada semana me doy cuenta de que yo siempre estoy predicando a un subconjunto de incrédulos que están presentes en las reuniones de la iglesia. Esta realidad se afirma en 1 Corintios 14, donde vemos una imagen del culto evangelístico.
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